Norah Carter: ¡Qué quieres de mí!, Gerüst Creaciones S.L., Madrid, 2016. (Reseña)

No voy a contar el argumento de esta lograda novela, porque eso no se hace y porque si alguien está interesado en saber más, puede ver un «book-trailer» cuidadísimo y elegante, donde se nos presenta de manera muy completa y convincente a los personajes y a sus situaciones, intrigándonos y sin revelar demasiado de la trama.

Baste decir que nos hallamos ante una novela erótico-romántica muy bien escrita por un sinnúmero de razones que paso a detallar.

El género es difícil. ¿Cómo alternar las escenas donde ha de primar lo erótico y que necesariamente ha de tener la crudeza y el hiperrealismo necesario para cautivar y excitar, y, al mismo tiempo mostrar delicadeza, sentimientos sutiles y bellos en aquellos aspectos de la relación amorosa que deben fluir de un romanticismo elegante? Bien, pues Norah Carter lo consigue de sobra con un dominio pleno de la prosa.

Muchos (yo entre ellos) seríamos incapaces de hacerlo y eso despierta siempre un poco de envidia sana (si es que alguna variedad de envidia puede ser sana, cosa que dudo).

Otra virtud es la plena pertenencia a un género: no es una novela híbrida de ésas en las que realmente no sabes lo que estás leyendo. No hay engaño al lector. Lo que se le promete en el título, en el diseño de la cubierta y en el video promocional se le da con generosidad, por lo que este libro gustará mucho, sin duda a los amantes del género y aun a otros que no lo aman especialmente.

El estilo es una prosa moderna, correcta, interesante y muy bien dosificada. El equilibrio entre descripciones  y diálogos es perfecto, algo mucho más difícil de lo que parece. Se lee con gran facilidad, lo que significa que se ha escrito con gran esfuerzo, pues no es sencillo conseguir un ritmo y una prosa fluida.

La protagonista es quien nos cuenta su historia en primera persona consigue que entremos en su mente y la comprendamos. Se establece vínculo indudable con el lector, que ve la situación por los ojos de la narradora.

Si hubiera que resaltar defectos —ninguno de importancia— diríamos que es un libro que gustará más a las mujeres que a los hombres, por la perspectiva desde la que se narra la acción, pero entendemos que ésa era la intención original de la autora, que sabe muy bien que en este país son las mujeres las que ,más leen.

La novela —que recomendamos sin dudarlo ni un instante— promete continuación o continuaciones, lo que siempre hace ilusión cuando una obra te gusta.