Como muestra de una vieja (y buena) vecindad virtual surgida de mi admiración por sus Humoradas (eludo hablar de la devoción que siento por su abuelo) Enrique Gallud me ha permitido leer las galeradas de su Jardiel, la risa inteligente; su último ensayo. Todo un honor y un… placer que intento agradecerle recomendando su lectura.
Al final (PARTE II. LA OBRA. Estudios biográficos y críticos) reafirma la convicción que había alcanzado el lector en la necesidad del libro que acaba de leer: no existía hasta el momento un solo ensayo que se fijara en todas las facetas de Enrique Jardiel Poncela (EJP) y éste lo hace.
Gallud escribe una biografía de EJP con datos de primerísima mano (el autor se prevale -¡bendito ventajismo!- de su íntima relación con los familiares) y escribe sobre la obra (sobre toda la obra: sus artículos periodísticos, sus conferencias, sus comedietas, sus cuentos, su poesía, sus aforismos, su cine y, claro está, sus novelas y su teatro) con la certera medida del buen ensayo: sin caer en lo plomizo, elude todo lo innecesario para dar los datos importantes sobre el estilo fundado por Jardiel.
Con el escalpelo crítico bien afilado Gallud destripa la poética de EJP para encontrar los fundamentos de su humor (que el título adelanta que es inteligente, siguiendo la maldita costumbre de los ensayistas de chafarnos el final) y nos explica como su concepción del teatro influyó en la narrativa, la del cine en el teatro y la de las historietas en el cine y todas en cada una de las otras.
Encabeza -de un modo muy jardeliano- cada apartado con una máxima mínima e ilustra cada rasgo de estilo con alguna cita para acercarnos más a la obra lo que tiene un grave inconveniente: les obligará -como ha hecho conmigo- a correr a su estantería, biblioteca o librería más cercana porque le entrarán unas ganas terribles de (re)leer a EJP a la luz de los certeros comentarios de Gallud.
Este estudio minucioso de su estilo finaliza con un apéndice necesario y que sólo quién ha tenido que hacer algo parecido sabe valorar: una Relación de sus escritos en las que el autor ordena por géneros la obra publicada e inédita de EJP. Imaginamos que en esa relación Gallud, como buen jardielista, habrá incluído algún que otro camelo que deberemos encontrar.
Una única pega: las galeradas no incluyen el abundante (y muy interesante si podemos hacer caso a los textos de los pies de fotos e ilustraciones) que acompañan al texto; por lo que me veré obligado a comprar el libro -y dar al autor los euros que bien se merece por tan buen trabajo- para disfrutar de las ilustraciones.